El autor confeso del crimen de Luzmila López Herrera (35) y Ximena (5), regresó al centro poblado de Chakaka, lugar en que excavó un forado de aproximadamente un metro y 20 de altura, para enterrar a su pareja e hija. Cabe resaltar que este sitio se encuentra al costado de a vivienda de los padres del detenido.
Aunque dijo estar arrepentido, el asesino relató paso a paso la manera cómo intentó desaparecer los cuerpos de sus familiares, luego de estrangularlas con una soguilla en la casa de sus padres. “No sabía qué hacer. No sabía si entrar a mi cuarto o irme. Como vi la barreta, se me ocurrió hacer un hueco”, dijo Óscar Medina Jara, asesino confeso de su ex pareja e hija.
La reconstrucción del doble crimen inició en un cuarto alquilado en San Martín de Porres, donde vivían Luzmila y la menor. Como se recuerda, el pasado 11 de enero, el autor confeso llegó a esta vivienda para llevarse a su ex pareja e hija hasta Huaura, tal como lo demuestran las cámaras de seguridad.
Por otro lado, Medina dijo a la policía en su defensa que cometió el crimen tras jugar güija en un descampado en Pasamayo, en el distrito de Chancay. De acuerdo al abogado, Álvaro Pelaez, el asesino habría jugado junto a su ex pareja e hija y a un sujeto más del cual no recuerda el nombre. “De pronto la niña empezó a convulsionar y empezó a sangrar por las fosas nasales”, dijo el abogado. Sin embargo, durante la confesión el sujeto entró en contradicciones en repetidas ocasiones.