Tras tres días de intensa búsqueda fueron encontrados los cuerpos de los dos militares que se encontraban como desaparecidos en el Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (VRAEM). Mediante un comunicado el Ministerio de Defensa informó que los cadáveres del técnico José Soto Díaz y del oficial de segunda Percy Chira Calderón lograron ser hallados por miembros de las unidades de control fluvial Hovercraft.
Los restos de los militares se encontraban a 16 kilómetros de la zona de Quiteni, específicamente en las inmediaciones del río Ene, a la altura del Cañón del Diablo, entre lo distritos de Mazamari y río Tambo.
Cabe indicar que los fallecidos se dirigían hacia el caserío de El Porvenir y la nave en la cual se desplazaban chocó contra otra, provocando que los militares cayeran y se los lleve la corriente.