Mientras los primeros bañistas ya llegan atraídos por el clima cálido, la tradicional playa Agua Dulce empieza a recuperar el movimiento que la convierte cada año en uno de los balnearios favoritos de los limeños que buscan un descanso económico. Aunque la temporada aún no inicia oficialmente, familias, deportistas y vecinos destacan que el espacio luce más ordenado y limpio que en temporadas previas, con tachos disponibles y mantenimiento constante.
Remodelación en pausa y críticas en la playa Pescadores
A pocos metros, el panorama es distinto. La playa Pescadores, conocida por su actividad marítima y su oferta gastronómica, continúa enfrentando reclamos tras la llamada recuperación del espacio público. Pescadores artesanales y comerciantes afirman haberse quedado sin lugar para trabajar, mientras que la nueva gestión municipal confirmó que la obra inició sin expediente técnico ni estudio de impacto ambiental, generando intervenciones improvisadas y gastos sin sustento.
El alcalde recién asumido, quien encontró una comuna con deudas acumuladas por unos 67 millones de soles, señaló que la municipalidad deberá reformular por completo el proyecto de Pescadores para evitar que se siga dañando el paisaje costero y se afecte la labor pesquera. Bloques de concreto colocados en la zona incluso dificultan la salida de embarcaciones y complican una eventual evacuación ante emergencias, por lo que la autoridad anunció su retiro progresivo.
Pese a este escenario, la comuna confía en que el denominado “Chorri Verano 2026” permita reforzar servicios, reunir personal para limpieza y fiscalización, y coordinar con los vecinos y comerciantes la puesta a punto de los balnearios. Tanto bañistas como pescadores coinciden en un pedido común: playas accesibles, ordenadas y seguras para residentes y visitantes en la temporada que se aproxima.


