El Congreso de la República aprobó por mayoría el octavo retiro de fondos del Sistema Privado de Pensiones, que permitirá a los afiliados disponer de hasta 21 mil 400 soles de sus cuentas individuales de AFP. La medida fue respaldada tras el dictamen favorable de la Comisión de Economía y ahora pasa al Poder Ejecutivo, que deberá promulgar la norma en los próximos días.
La presidenta Dina Boluarte y el ministro de Economía, Raúl Pérez Reyes, ya habían manifestado su respaldo a la iniciativa, por lo que no se esperan mayores trabas para su aplicación. Según estimaciones, el proceso de desembolso podría iniciar en noviembre, lo que abre la expectativa entre millones de aportantes que buscan liquidez inmediata.
De acuerdo con el exministro de Economía David Tuesta, el retiro se realizaría en cuatro armadas, una UIT por mes, debido a que las AFP requieren un proceso ordenado de desinversión de activos. Tuesta recordó además que el 20% de afiliados ya no tiene fondos en sus cuentas, mientras que el resto conserva al menos el equivalente a una UIT.
IMPACTO EN LA ECONOMÍA Y EN LOS AFILIADOS
El exministro precisó que quienes opten por no retirar su dinero mantendrán sus ahorros con la misma rentabilidad. En cambio, los que sí decidan disponer de sus fondos generarán un efecto inmediato en la economía, que podría reflejarse en el crecimiento del PBI hasta el primer trimestre de 2026. Este impacto, dijo, será perceptible en los próximos meses debido a la magnitud de los desembolsos.
Si bien el retiro de AFP ofrecerá un alivio económico de corto plazo para millones de familias, Tuesta advirtió que en el mediano plazo también traerá consecuencias negativas. Entre ellas, la dificultad para acceder a préstamos hipotecarios, ya que el sistema financiero requiere fondos de largo plazo para sostener este tipo de financiamientos.