Agentes de la Unidad de Halcones intervinieron a Luis Alberto Chuquizuta Guerra, alias "Piscis", en posesión de un arma de fuego registrada a nombre del suboficial Juan Joel Ñaupari Salva, una de las víctimas de la masacre ocurrida en Pataz, La Libertad.
Durante la intervención, Chuquizuta alegó que el arma le había sido confiada por el propio Ñaupari y que pretendía entregarla a su hermano. No obstante, sus declaraciones fueron contradictorias y no logró acreditar la procedencia del armamento, lo que motivó su detención inmediata.
El intervenido afirmó trabajar para la empresa de seguridad informal R&R, que operaba en conjunto con Libmar SAC, una minera que mantenía contratos con la empresa aurífera Poderosa. Esta relación ha llamado la atención de las autoridades, especialmente porque existen sospechas sobre la implicancia de efectivos policiales en dicha empresa de seguridad.
PERMANECE DETENIDO
Al no poder explicar cómo obtuvo el arma de fuego, Chuquizuta fue trasladado a la sede de la Depincri 1 de San Juan de Lurigancho, donde permanecerá detenido por 15 días mientras duren las investigaciones. Representantes de la Fiscalía de Crimen Organizado de La Libertad ya tomaron su declaración, y se ha abierto una nueva línea de investigación que involucra presunto tráfico de armas.