Un incendio de gran magnitud se desató el lunes a las 5 de la tarde en un almacén de juguetes ubicado en la cuadra 4 del jirón Cangallo. La emergencia, clasificada como código 4, requirió la intervención de más de 50 unidades de bomberos provenientes de Lima Norte, Centro y Sur. Sin embargo, la alta cantidad de material inflamable, en su mayoría plástico, dificultó las labores de extinción, avivando las llamas con el paso de las horas.
El comandante Estuardo Bastas informó que cuatro edificaciones resultaron comprometidas, así como dos grandes almacenes de productos comerciales. Además, la constante exposición al calor y el recalentamiento de los vehículos de emergencia provocaron el colapso de tres unidades de bomberos, incluyendo una de Lurín y otra de Lince, que sufrió fallas mecánicas en su sistema de bombeo.
Mientras los bomberos luchaban por controlar el fuego, se reportó que uno de los almacenes cercanos continuaba descargando productos, lo que generó indignación entre los presentes. Asimismo, la falta de presión de agua complicó aún más la emergencia. Según Jorge Gómez, presidente de Sedapal, hubo un desabastecimiento momentáneo debido a la magnitud del incendio, y elevar el volumen del agua habría puesto en riesgo las tuberías antiguas del Centro de Lima.
LOGRAN CONFINAR INCENDIO
Tras 17 horas de intensa labor, los bomberos lograron confinar el incendio, aunque continuaban trabajando en la zona para sofocar el fuego por completo. Mientras tanto, comerciantes y trabajadores de los almacenes intentaban recuperar algunos materiales, en su mayoría plásticos, para salvar parte de su mercadería. Las unidades de bomberos y camiones cisterna siguieron llegando al lugar para reforzar los esfuerzos de mitigación.
