Tras el reciente asesinato de un conductor de la empresa Transportes “El Rápido”, Julio Campos, dirigente del Comité del Gremio de Transportistas del Perú, anunció una nueva jornada de movilización social a nivel nacional, programada tentativamente para el 10 y 11 de diciembre. Según Campos, la decisión será ratificada el 27 de noviembre en una reunión de dirigentes en Lima. Esta manifestación se suma al descontento por el incremento de la inseguridad y el rechazo a las denominadas “leyes pro crimen organizado”.
Campos destacó que, a pesar de los casi 60 días de Estado de Emergencia, la criminalidad sigue afectando gravemente al sector transporte. “Hasta el día de ayer sumamos aproximadamente 60 asesinatos a conductores. ¿Cómo puede el gobierno decir que vivimos en un país con seguridad?”, expresó indignado el dirigente. Además, hizo un balance de la última movilización durante el Foro APEC, en la que participaron 13 regiones en un paro total y 9 con movilizaciones parciales.
Sin embargo, no todos los sectores apoyan esta convocatoria. Martín Ojeda, presidente de la Cámara de la Industria del Transporte, calificó a los organizadores como transportistas informales y rechazó sus métodos de protesta. "Bloquear carreteras no es la solución. Son transportistas ilegales que no representan al sector formal. Durante el paro de la semana de APEC, el transporte formal trabajó con normalidad”, señaló Ojeda, cuestionando la legitimidad del movimiento.
OPINIONES DIVIDIDAS
En las calles, los conductores y pasajeros tienen opiniones divididas. Mientras algunos conductores reconocen el temor por la inseguridad y consideran necesario unirse a estas acciones, pasajeros manifiestan preocupación por el impacto de los paros. “Nos perjudica a todos, pero entiendo que ellos se sienten forzados. Cada día que no trabajan pierden dinero, igual que nosotros que dependemos de su servicio”, comentó una pasajera. La fecha exacta de la manifestación será definida el 27 de noviembre, en un ambiente de creciente tensión en el sector transporte.