Causó gran malestar entre miles de usuarios. Un bus del Metropolitano sufrió un desperfecto en hora punta, provocando congestión vehicular en la vía exclusiva a la altura de la estación Caquetá en el límite entre Rímac y San Martín de Porres.
Este inconveniente obligó a que los buses se desviaran por la avenida Caquetá, generando aún más congestión vehicular en la zona. El bus varado fue remolcado después de una hora, permitiendo restablecer el servicio.
No obstante, el incidente dejó al descubierto las falencias en el mantenimiento de la flota, que tiene una antigüedad de más de 12 años, pese a que una normativa exige su reemplazo después de este periodo.
ESPECIALISTA OPINA
Luis Quispe Candia, presidente de la ONG Luz Ámbar, sostuvo que tanto la Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU) como la concesionaria del Metropolitano deben garantizar el buen estado de los buses.