El robo de celulares se convirtió en el delito preferido de los delincuentes. Basta un arrebato o amenazas hacia las víctimas con un arma de fuego para apoderarse de estos dispositivos que pese a estar manchados de sangre y violencia, son vendidos y comprados en mercados negros como Las Malvinas.
Sin embargo, a este lugar no solo llegan los criminales sino también algunos malos efectivos policiales en actividad como Antonio Lazo Campomanes, quien fue detenido en flagrancia con 22 celulares de alta gama que fueron robados a un motorizado de una tienda de telefonía. Este sujeto pretendía vender los equipos en este mercado negro.
En su mochila también se encontró su casco de reglamento. Lo más indignante es que pese a que fue capturado, hoy el cuestionado agente de la Policía Nacional del Perú (PNP) sigue libre en las calles.
Este tipo de acciones entre efectivos policiales sería más frecuente de lo que imagina. Así lo reveló un informe del diario El Comercio a cargo del periodista Juan Pablo León quien obtuvo el testimonio de un policía en actividad que revela paso a paso cómo operan estos malos agentes del orden.
RED CRIMINAL AL INTERIOR DE LA PNP
Estos agentes policiales que integran esta red de venta de celulares, pueden llegar a dejar en libertad a los asaltantes a cambio de obtener la mayor cantidad de celulares.
Estas modalidades reflejarían el por qué los criminales continúan actuando con impunidad y los mercados negros como Las Malvinas siguen funcionando bajo la mirada indiferente de la Policía Nacional del Perú (PNP).
Para el exministro del Interior, Eduardo Pérez Rocha, resulta poco probable que estos agentes policiales inmersos en estos delitos sean sancionados. Además, asegura que depende del actual ministro del Interior, Willy Huerta reformar la institución policial para erradicar estos malos elementos y poner fin a la criminalidad.
