Un laboratorio clandestino fue intervenido en la calle Acero, distrito de Ate, pues se fabricaba un producto popular en Venezuela llamado chimó o tabaco masticable y que según las autoridades es altamente tóxico.
“Su función es la de controlar el hambre, la sede, el cansancio, pero ¿qué pasa? Su proceso de elaboración algunos elementos químicos como el potasio, ácido cítrico, el extracto de rocoto, genera cáncer a la lengua, en la boca, el esófago, entonces es un producto dañino para la salud”, dijo el coronel Luis Legua, jefe de la División de Delitos Intelectuales.
Asimismo, contó que este producto no presentaba ninguna autorización ni registro sanitario para su fabricación y posterior comercialización en Perú.
