Fue cerca a Moscú donde unos delincuentes hicieron explotar un cajero automático para obtener el dinero que había en su interior.
Los malhechores encapuchados instalaron el artefacto explosivo en la máquina, luego salieron antes que se produzca el estallido.
Según reportes, los ladrones lograron llevarse el botín. Esta es una modalidad que se usa cada vez más entre los delincuentes.