En Roma, después de 300 años mostrarán por vez primera la llamada “Escalera Santa” por la que se dice subió Jesús de Nazaret para ser juzgado. Solo por dos meses los peregrinos podrán pisar el mármol original de esta estructura. Así mismo están restaurando los listones de madera de nogal que la cubrían.
La historia cuanta que esta escalera había sido llevada de Jerusalén a Roma por órdenes del emperador Constantino. Pero en 1723 esta habría sido recubierta con madera a fin de preservarla del desgaste. Desde entonces, a excepción de un lapso en 1950, la protección a la escalera no había sido retirada.
Por la importancia que representa esta reliquia, los creyentes suben durante su visita de rodillas, los pies recubiertos y orando en cada paso para expiar los pecados y conectarse de alguna manera con la presencia del nazareno y los momentos que vivió en esos escalones.