Según el Centro Internacional para Niños desaparecidos y explotados (ICMEC) más de 1,8 millones de menores son víctimas de explotación sexual, el cual ya no solo se ve en las calles, sino también en internet.
Entre una de las principales razones para la desaparición de estos niños se encuentra la fuga del hogar, el secuestro y la trata de personas, esta última siendo la más recurrente. Los niños quedan a manos de inescrupulosas personas que los utilizan para satisfacer el mercado negro que hay dentro de la internet.
Otra de las desaparciones más comunes es la que se trata de la fuga del hogar. Muchas veces, un niño que huye intenta escapar de la violencia dentro de la familia o del abuso sexual. Los menores de edad que recurren a la huida suelen exponerse a peligros más graves de lo que se hayan en casa.
Cifras de la Red de Latinoamérica de desaparecidos, se afirma que aproximadamente en un 75% de esas fugas terminan en delitos. Los menos acaban siendo presas de personas que las ultrajan y las abandonan en las calles.
El secuestro de menores también suele ser un caso recurrente, donde los niños son llevados por la fuerza. El problema de fondo es que no existe una estrategia internacional dirigida a abordar el problema de los niños desaparecidos.