Ni la petición de clemencia del Papa Francisco pudo salvar a Kelly Gissendaner. La mujer de 47 años, condenada en febrero de 1997 por la muerte de su esposo, recibió la inyección letal pese a que el Sumo Pontífice había pedido a las autoridades estadounidenses perdonarle la vida. Es la primera mujer en recibir el máximo castigo en el estado de Georgia en 70 años.
EEUU: Ejecutan a mujer pese a llamado del Papa Francisco
Kelly Gissendaner, que fue condenada en 1997, recibió la inyección letal.