En la Siberia, en el pequeño pueblo ruso de Shereguesh, un total de 1.498 personas se reunieron para esquiar en trajes de baño a unos 40 grados bajo cero. Sin prestar atención a las bajas temperaturas, los deportistas se lanzaron por las pendientes de Shereguesh, ubicado en la óblast en región la de Kémerovo, en Siberia, vistiendo solamente bikinis o pantalones de baño.
Pese a que la mayoría de los participantes eran rusos, en el descenso también estuvieron esquiadores de otros países, como Estados Unidos, China, Alemania, Italia, Alemania y Francia.
Como todos loa años este evento tuvo lugar en el marco del el festival Grelka, llevado a cabo anualmente en la localidad siberiana, muy conocida en Rusia por sus montañas nevadas y sus estaciones de esquí.