En la siempre complicada tarea de reinventarse, Liam Neeson ha demostrado no tener miedo al riesgo. El actor de carácter que ha colaborado con directores de la talla de Woody Allen, Steven Spielberg o Martin Scorsese, se ha convertido en últimos en un gran héroe de acción. Después de haber interpretado complejos personajes históricos como Oskar Schindler y Michael Collins, el actor irlandés dio un giro inesperado a su carrera con la saga de acción Taken (Búsqueda implacable), cinta que lo consagró como héroe de acción.
Pero el actor tiene un amplio currículo, ya que ha sido quien entrenó a Batman en “Batman Begins”, fue el hereo sin rostro en la recordada “Darkman”, fue Zeus en “Furia de Titanes”, en Taken (Búsqueda Implacable), el entonces todavía cincuentón Neeson se estrenaba como un definitivo héroe de armas tomar que desata en furia revelándose como una efectiva e imparable máquina de matar.
Cabe resaltar también que Neeson tuvo una muy importante participación en la historia de Star Wars, en el “Episodio I: La amenaza fantasma”; como el maestro Jedi Qui-Gon Jinn, mentor de Obi Wan Kenobi y fue el responsable de encontrar y encaminar el futuro de Anakin Skywalker, quien años después se convertiría en el temido Darth Vader.