El público, que acude a la zona para acercarse a conocer la vida salvaje de los animales, en el Parque Nacional Kruger de Sudáfrica, no supo cómo reaccionar ante el evento. En lugar de molestarse por quedarse varados sin poder avanzar con sus vehículos, decidieron tomar la situación con calma, para no asustar a los leones, previniendo un posible ataque de los felinos y al mismo tiempo siendo testigos de la increíble escena que tenían enfrente.
Siempre se dice que es mejor no molestar a alguien cuando come y mucho menos si se trata de 18 leones hambrientos. Los testigos dicen que fue algo impresionante, además que no es algo tan común que suceda, por lo que presenciarlo se convirtió en una experiencia única.
Los testigos no dudaron ni un segundo en registrar el hecho con sus cámaras y compartirlo a través de las redes sociales.