El Gobierno de México expresó su rechazo a la decisión del Ministerio de Relaciones Exteriores del Perú de romper relaciones diplomáticas, luego de que se concediera asilo político a la ex primera ministra Betssy Chávez. A través de un comunicado, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) sostuvo que el acto fue legítimo y conforme al derecho internacional, reafirmando la soberanía del país para otorgar asilo.
Según el pronunciamiento, México actuó en cumplimiento de la Convención sobre Asilo Diplomático de 1954, también conocida como la Convención de Caracas, suscrita tanto por Perú como por México. Dicho tratado establece que solo el Estado asilante puede determinar si existe persecución política, lo que respalda su decisión en este caso.
El gobierno mexicano aseguró que el asilo se concedió tras una evaluación legal y constitucional, al considerar que Betssy Chávez denunció vulneraciones a sus derechos humanos desde su detención en 2023. Asimismo, rechazó que su decisión implique una intromisión en los asuntos internos del Perú y calificó la respuesta diplomática peruana como “desproporcionada”.
CARÁCTER DEL ASILO
Finalmente, México reafirmó su vocación humanista y de respeto a los derechos humanos, comprometiéndose a seguir ofreciendo refugio a personas perseguidas por motivos políticos. Además, expresó su deseo de mantener los lazos de amistad con el pueblo peruano y de resolver las diferencias mediante el diálogo y la diplomacia.
    

