A un año de haberse cumplido de las manifestaciones que se registraron en Puno contra el gobierno de la presidenta Dina Boluarte, diversas agrupaciones radicales de la región buscan trasladar la violencia a otras ciudades del Perú.
Asimismo, en dicha provincia sea declarado como días de duelo nacional el 8 y 9 de enero tras los 18 fallecidos que se suscitaron en los enfrentamientos con miembros de las Fuerzas Armadas y Policía Nacional del Perú (PNP).
RECUPERAR CONFIANZA
Para el excongresista Richard Arce los pobladores de Puno volverán a creer en la presidenta y su grupo de trabajo si se conoce las verdaderas causas de las muertes de los manifestantes.
“Si quiere recuperar la confianza o reconciliarte, eso pasa por justicia y eso no ha habido con las víctimas. Eso genera que sectores aprovechan la inacción de parte del Estado”, señaló.
Finalmente, el exjefe de la Dircote, José Baella reveló que el plan del sector de la izquierda del país es aprovechar las muertes que se registran en las manifestaciones para sacar un provecho.
“El objetivo es claro. La extrema izquierda lo que busca es muertos, heridos, incendios (fiscalía, comisarías y poderes judiciales)”, sostuvo.